La próxima administración federal, que encabezará la presidenta electa Claudia Sheinbaum, deberá garantizar el acceso a los medicamentos y elevar la cobertura de salud, que actualmente es de 70%, señaló Larry Rubin, Director Ejecutivo de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF).

“La salud es esencial para toda persona, la sociedad y el país, y procurar el acceso de la población a los medicamentos y servicios que necesita es un compromiso impostergable para el nuevo gobierno”, expresó durante el panel “La reorganización del acceso al mercado en México: Medicamentos innovadores, genéricos y dispositivos médicos”.

Dijo que una de las principales barreras para el acceso a la salud en México es la escasa inversión pública, que actualmente equivale al 2% del PIB, mientras que en América Latina el promedio es de 6%.

Y refirió que dicha situación ha provocado que el gasto de bolsillo de la población en salud se incremente a 47%, muy superior al promedio de la OCDE, que es del 24%. “Se requiere más inversión en salud para el acceso de la población a medicamentos innovadores, así como a infraestructura y servicios hospitalarios y clínicos de calidad”, subrayó Rubin,

Por su parte, Jorge Luis Caridad, gerente general de Johnson & Johnson – Medicina de Innovación, planteó que el acceso a la innovación se obstaculiza debido a barreras regulatorias que existen en el país.

“México tarda entre 12 y 18 meses para aprobar medicamentos. Estos retrasos demuestran la necesidad de que la Cofepris cuente con más recursos para la digitalización de sus procesos y la aceleración de los tiempos de aprobación, con apego a estándares internacionales”, alertó.

Añadió que también existen barreras para la investigación clínica, lo que es crítico para el acceso temprano a la innovación.

“México tiene la gran oportunidad de ser un referente en la región, para lo que se necesita más especialización e infraestructura, así como más competitividad en los tiempos de aprobación de ensayos clínicos. Mientras que en Latinoamérica éstos se aprueban de 45 a 60 días, en México tenemos demoras de 180 días, lo que nos pone en desventaja”, puntualizó.